Cada esfuerzo pone en relieve la potencia de una esperanza.
Experimenta nos dejó otra vez clavada la fuerza del compromiso y la semilla de otras lógicas de producción social humana.
Entablamos estrategias para reivindicar el arte como movilizador personal y comunitario.
Propusimos recurrir a la grupalidad para estimular micropolítica con enfoque escénico, pedagógico desde una perspectiva de Ecología Corporal®.
Vincularnos, venirnos de lejos, en plan ¿hacia dónde? a tientas más con la certeza intuitiva de viajar a generar pasión y deseo que nos devuelva esa fe potente de honrar lo que somos, de recuperarnos la vida.
Retormar escrituras, escribirnos de nuevo. Recordar danzas aprendidas, descubrir nuevos movimientos. Agradecernos cuerpo.
Ser nuestras historias, las de siempre, las nuevas, las utópicas, las por venir.
Serlas escuchando, transformándonos, hablando, comiendo,
cooperando, andando, bailando.